Gran Premio Enor 2025
El proyecto encarna una arquitectura comprometida con la transformación energética, al convertir una infraestructura técnica en un símbolo pedagógico del cambio hacia energías limpias. Su diseño combina eficiencia funcional y valor comunicativo, haciendo visible un proceso que normalmente permanece oculto. La propuesta destaca por su responsabilidad social al fomentar la gestión sostenible de los recursos y la reducción de emisiones. Su lenguaje constructivo —una base sólida y una linterna ligera y transparente— expresa con claridad la circularidad energética y económica que representa. Además, establece un modelo replicable para otras ciudades, donde la arquitectura se convierte en herramienta activa de transformación y conciencia colectiva.